Seis antidisturbios ejecutan por obligación un complicado desahucio en el centro de Madrid que finalizará en tragedia. Un equipo de Asuntos Internos de la Policía será el encargado de investigar los hechos, ante los cuales los seis podrían enfrentarse a una serie de graves acusaciones. El grupo busca una salida por su cuenta complicando aún más la situación y se alían con una de las agentes obsesionada con el caso. Poco a poco descubren mucho más de lo que jamás hubiesen imaginado.
“Antidisturbios”, la espléndida y asfixiante serie de Movistar+ bajo el cuño de Sorogoyen.
Movistar+ vuelve al campo de batalla con “Antidisturbios”, la nueva serie de Isabel Peña y Rodrigo Sorogoyen. Ambos creadores y directores que ya han trabajado juntos en numerosas ocasiones con proyectos como “Madre” y “El reino” vuelven a ponerse detrás de las cámaras tras una larga temporada llena de premios. Esta vez en la serie no iba a ser menos; consiguen mantener de manera excepcional la tensión y el nerviosismo de cada capítulo, así como, el arrastre de sistemas a lo largo de los seis episodios. Ambos directores se fusionan de nuevo con el ritmo frenético de los acontecimientos en uno de sus géneros preferidos.
De la misma forma, el equipo actoral se defiende de la mejor manera posible y aportan actuaciones inéditas. Vicky Luengo recién salida de la serie “Madres”, cambia absolutamente de registro para dar la sorpresa tanto en el personaje como en la fuerza interior y psicológica que empuja. Es tanta su energía interpretativa que hunde al actor Nico Romero dejándolo como un eterno secundario mientras, ella se alza con el verdadero protagonismo. Asimismo, todo el equipo de antidisturbios nos ofrece el asombro y la admiración con personajes tan ásperos como afectuosos, sobre todo Raúl Arévalo, Hovik Keuchkerian y Patrick Criado.
Sorogoyen y Peña además de la magnífica dirección, logran un colosal guion.
El realismo de los hechos narrados es tan extraordinario que te introduce en la soberbia de los acontecimientos. Más que una serie, perfectamente se podría definir como un documental por la gran verosimilitud que esta puede tener con la vida real. Por eso no sería de extrañar encontrarnos ante un caso similar que abriera los telediarios de medio mundo. Además del guion, el vestuario ayuda a introducirnos en la trama, y es que el agobio que sufren los antidisturbios con su uniforme traspasa la pantalla del televisor.
Sin embargo, no es hasta la edición y el montaje donde de verdad se observa la gran velocidad de las acciones. Las conversaciones más inquietantes se solapan y nos impiden respirar a un ritmo al que su director nos tiene acostumbrados. Estos hechos se incrementan por el acertado uso de la cámara en mano para narrar lo sucedido, así como los continuos planos cerrados que sólo propician la ansiedad. Es tan insolente como equitativo a la hora de atraparnos en otra de las grandes y majestuosas series de Movistar+.
“Antidisturbios” nos ofrece un producto novedoso a la par que realista que nunca antes habíamos podido apreciar. A los mandos de esta producción se encuentra Sorogoyen, el perfecto director del thriller que nos regala uno de sus mayores trabajos. Éste siempre encuentra a los mejores intérpretes para los personajes de sus proyectos y consigue hacerlos brillar. No sólo estamos ante otro acierto de la plataforma, sino ante una de las grandes revelaciones del año que nos dejará sin habla.
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